Macroregión

Stochiero describe una macroregión como «un enfoque pragmático de la necesidad de encontrar nuevas formas para que las políticas públicas sean más efectivas en una gran área transfronteriza de varios niveles, con una mejor coordinación de las instituciones y recursos existentes». Este enfoque fue confirmado por la creación de la Estrategia Báltica.

En el marco de «una mejor coordinación y un uso más estratégico de los programas de la UE», la Estrategia Báltica establece los pilares para las macrorregiones europeas:

  1. la identificación de un área territorial que atraviesa varios estados (UE o no UE) afectados por problemas comunes;
  2. la voluntad de establecer una cooperación territorial fortalecida en un número limitado de áreas, dirigida a economías de escala entre los niveles de gobernanza y los diferentes programas y fondos;
  3. la implementación de un acuerdo flexible,

Estos objetivos se implementan a través de un «Plan de Acción» organizado en torno a áreas temáticas, especificando los principales desafíos y proyectos emblemáticos de mayor escala que los proyectos tradicionales de cooperación territorial.

Actualmente, cuatro macro regiones ya están operativas: las estrategias Báltica, el Danubia, Alpina y la Adriática-Jónica. El progreso de la Estrategia del Mar Báltico inspiró de inmediato otras áreas de la Unión Europea, como el Arco Atlántico. Las redes territoriales atlánticas manifestaron su deseo de ser parte del enfoque macrorregional al publicar ya en 2009 documentos de posicionamiento, como el artículo de opinión de Atlantic Cities, titulado «La estrategia báltica: un espejo para el Atlántico».

El 09/09/09, las asociaciones atlánticas presentaron la idea a la presidencia española de la Unión Europea. Como sucedió con la Estrategia del Báltico, la futura macro región tendría que ser «patrocinada» por un estado atlántico. Esto serviría para obtener el acuerdo del Consejo Europeo para lanzar institucionalmente la iniciativa. Por lo tanto, la Presidencia española (primer semestre de 2010) fue una oportunidad única.

Así, la Presidencia española trajo la idea de una estrategia atlántica al Consejo Europeo. Sorprendentemente, las conclusiones del Consejo de la Unión Europea de junio de 2010 invitaron a la Comisión Europea a «presentar una estrategia de la Unión Europea para la Región Atlántica como parte de la política marítima integrada». El Atlántico solo tendría una estrategia marítima.

Hoy, todavía hay una oportunidad de evolución para la Estrategia Marítima Atlántica hacia una macro-región completa. La instalación de una iniciativa macrorregional podría proponerse durante la presidencia portuguesa en 2021. Las ciudades atlánticas están convencidas de que una mayor cooperación es primordial para tener un crecimiento económico pleno y crecer juntos en la crisis de 2020.